Minutos antes de las 7 de la mañana, explotó la caldera de la escuela N° 24 de Puerto Deseado, en la zona noreste de Santa Cruz. El estruendo se sintió en varias cuadras a la redonda y puso en alerta a los docentes que comenzaban a llegar al establecimiento educativo para dictar clases en el turno mañana. Según pudo saber este medio, no hubo heridos y los alumnos aún no se encontraban ingresando a la escuela, donde las clases fueron suspendidas. En tanto, tras el llamado de alerta, la policía local cortó las calles de la zona e investiga el hecho.
Pero sobre este tema habló este jueves con La Opinión Zona Norte, Daniel Sampayo, secretario general de ADOSAC de la localidad Deseadense, quien repartió culpas entre la gestión anterior del Consejo Provincial de Educación y los actuales responsables de esa cartera educativa. “Hoy le tocó a la escuela 24, que tiene aproximadamente 600 alumnos en dos turnos, y que le podría haber pasado a cualquiera de las otras instituciones porque están todas con la misma situación, con problema de gas, problema de calefacción, con calefactores que tienen 25 años y que no se cambian”, empezó resumiendo.
También describió como “un desastre” el que “dejó el gobierno anterior, mandando gente que no era idónea, desmantelando las calderas y se llevaron las piezas, no se devolvieron, quedaron desarmados” pero agregó que “hay falencias que no se solucionan a través del tiempo por falta de conocimiento de la gente que envían para hacer el mantenimiento, y ahora, la gente que es idónea no recibe las cosas que necesitan como deberían recibir para subsanar estos inconvenientes”, mencionó.
Sampayo indicó que esta es una situación que se denuncia en cada reunión de la mesa paritaria laboral. “Se les manda (al CPE) cada 15 días todas las novedades de las escuelas y pese a eso, seguimos igual”, y mencionó que la escuela Especial “ya tuvo 9 interrupciones de clases por 2 o 3 semanas porque tiene tres calefacciones distintas y están las tres rotas”.
Incluso, el referente de ADOSAC subrayó que en ese establecimiento se compraron 8 calentadores Split, pero a los pocos días “se prendió fuego todo” porque “los cables tenían 40 años, no estaban preparados para eso, y no se tomaron el trabajo de medir”. Entre otras cosas, el dirigente gremial sostuvo que “hoy fue una desgracia con suerte porque no había gente” ya que “la explosión se escuchó a 200 metros”, así que “imagínense si hubiera estado personal de limpieza que entra más temprano, que tienen que guardar sus elementos en la caldera”, dijo. Finalmente, insistió que “el CPE está informado” de lo que pasa con las escuelas.
Fuente: La Opinión Austral.